Sirva este titular, para llamar la atención sobre un monumento conocido en una de sus partes y totalmente olvidado en otra. Me refiero al acueducto conocido como los Caños de Carmona, en la ciudad de Sevilla.
Cuando a alguien le preguntan sobre este monumento de época romana y posterior reconstrucción almohade, inmediatamente piensa en los paños que se sitúan en la parte más noble de Sevilla, en la Avenida de Luis Montoto, pero pocos conocen que más antiguo que esos tramos es el situado en la calle Cigüeña del barrio de Los Pajaritos.
No voy a entrar sobre la restauración reciente que se ha llevado a cabo con él (que bajo mi punto de vista parece algo de hace 10 años, creo que restaurar no significa hacer todo nuevo).
Sobre lo que quiero hablar, es del estado de abandono que sufre este tramo el cual se ve sometido a pintadas, orines y cacas de perro y los continuos balonazos que sufren sus arquerías, las cuales sirven de lujosas porterías de futbol para los futuros Jesús Navas.
Puede que a esta zona de la ciudad vengan pocos turistas a hacerse fotografías o para admirar el magnifico legado de la ciudad (aunque como hemos dicho antes, con la restauración poco queda de lo original); pero es evidente que no puede quedar en el olvido solo porque este situado en uno de los barrios marginales de Sevilla, o mejor dicho, el barrio es el que se ha situado donde ya estaba el acueducto, porque él llego primero.
Quizás seas muy guapo de cara allá por Luis Montoto, pero no veas como te huelen los pies en los Pajaritos.
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